OPINIÓN

Academias para la paz

David Gómez-Álvarez EN MURAL

3 MIN 00 SEG

Icono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redes
Uno de cada tres jaliscienses vive en situación de pobreza. Según datos del INEGI y Coneval, durante la pandemia la pobreza en el estado aumentó de 27.8 a 31.4 por ciento. Aunque Jalisco está por debajo del promedio nacional de 43.9 por ciento, la marginación social en la entidad sigue siendo uno de los principales problemas públicos. No solo porque existe un imperativo de ética pública para garantizar mínimos de bienestar para toda la población, sino porque sus efectos nocivos provocan otros problemas igualmente preocupantes, como el de la inseguridad y la violencia. La pobreza es un caldo de cultivo para el crimen organizado, que se aprovecha de las necesidades sociales insatisfechas de jóvenes desempleados y excluidos para ofrecerles falsas oportunidades de futuro. Combatir la pobreza, sin criminalizarla, también es combatir la criminalidad.