Para los países de este lado del mundo y especialmente para Latinoamérica, esto ha venido sucediendo con mayor frecuencia a partir de los años 80 y es así como los nombres de los colombianos Luis Herrera, Fabio Parra, Santiago Botero, Nairo Quintana, Egan Bernal y el ecuatoriano Richard Carapaz se han elevado al olimpo de los mejores ciclistas del mundo, con sonoras victorias en las más importantes carreras del planeta, apareciendo en su momento como "conquistadores" en la vieja casona del ciclismo europeo para no hablar de "invasores".