Ni multitudes, ni ventas, ni gritos. Apenas la foto del recuerdo pudieron llevarse este 15 de septiembre quienes merodeaban por el Centro de Guadalajara.
Los tumultos típicos de otros años en este día desaparecieron para dar paso a calles vacías.
Tapatíos acataron la petición de seguir la celebración desda casa, ante el riesgo que permanece por el coronavirus.
Desde las 18:00 horas, el Primer Cuadro de Guadalajara quedó cercado con vallas.
Algunos transeúntes pidieron ingresar para abordar la Línea 3, pero no se les permitió.
"Hammy", un mimo de Veracruz, quería entrar al Grito, pero se quedó con las ganas.
Lo mismo le ocurrió a los de los pajaritos de la suerte.
En la Glorieta Chapalita, la tradicional verbena también se canceló.
Sólo un vendedor de banderas dio el toque patrio al lugar.
Incluso una quinceañera aprovechó la poca afluencia para realizar su sesión de fotos.