Vivimos en un mundo que produce suficiente alimento para abastecer a toda su población, por lo que resulta paradójico que millones de personas sigan sufriendo hambre y desnutrición. Cada año, alrededor de un tercio de los alimentos producidos para consumo humano se pierde o se desperdicia en todo el planeta. El Día Internacional de Concienciación sobre la Pérdida y el Desperdicio de Alimentos, establecido en 2020, nos recuerda la urgencia de abordar esta problemática para poder alinearnos con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), en particular el ODS 2: Hambre cero y el ODS 12: Producción y consumo responsables.