La Misión de Observación Electoral de la OEA cerró su informe sobre la elección federal de Jueces con un diagnóstico lapidario: sin anclas en la independencia, imparcialidad, y eficacia, el experimento de "electoralizar" la justicia naufragará; "la Misión no recomienda que este modelo de selección de Jueces se replique para otros países de la región".