OPINIÓN

La adrenalina de jugar con estadio lleno, ante millones de televidentes y con el juego en la línea no tiene comparación. Pero algunos jugadores han buscado esas emociones pisando el acelerador a fondo de un monstruo de cuatro ruedas con un poder encantadoramente destructivo. De esto queda constancia en tristes historias de accidentes automovilísticos que cobraron la vida o la carrera de algunos miembros del futbol mexicano.

La Dominguera

San Cadilla EN MURAL

MIN SEG

Icono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redes
Duras lecciones