OPINIÓN

MIRADOR / Armando Fuentes Aguirre EN MURAL

Icono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redes
Jean Cusset, ateo con excepción de la vez que escuchó el Magnificat de Bach, dio un nuevo sorbo a su martini -con dos aceitunas como siempre- y continuó: