México está inmerso en un interregnum económico. Pese a los vientos del Norte nuestra economía no se colapsa, aún. Pero tampoco crece. Hay planes importantes para incrementar la inversión, pero también hay quinta columna interna que, con declaraciones, o acciones, la sabotean y ahuyentan. Hasta cierto punto, nuestro destino financiero es nuestra decisión. Pero también hay nubecillas externas que nos llevan hacia potencial catarata.
Juan Enríquez Cabot es autor de diversos libros sobre tecnología y académico ocasional.