En San Marcos Atexquilapan, a mil 300 kilómetros de San Antonio,
Texas, tres familias esperan entre llanto e incertidumbre noticias sobre Yovani, Jair y Misael, tres jóvenes de Naolinco, Veracruz, que abordaron el tráiler en el que 53 migrantes murieron
asfixiados.