Se conoce como educación especial a los servicios educativos que ofrecen atención equitativa a estudiantes con alguna discapacidad, transtorno generalizado del desarrollo o aptitudes sobresalientes de acuerdo con sus capacidades, circunstancias, necesidades, estilos y ritmo de aprendizaje diverso, explica la Secretaría de Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación del Gobierno del Estado de México.
"Los estudiantes con discapacidad son aquellos que, por razón congénita o adquirida, tienen una o más deficiencias de carácter físico, intelectual o sensorial, ya sea permanente o temporal, y que al interactuar con las barreras que le impone el entorno social, las cuales pueden impedir su inclusión plena y efectiva, en igualdad de condiciones con los demás", explica la dependencia gubernamental.
Y si bien las personas con condiciones del neurodesarrollo como los trastornos de espectro austista o de déficit de atención no son consideradas como discapacitadas, lidian con barreras para aprender y participar en la vida familiar, social y escolar debido a diversas dificultades sociales, comunicativas, lingüísticas, sensoriales y conductuales, complementa.