Esos ojazos verdes<BR> <BR> <BR>Pues en esta ocasión no hubo poder -ni Cristian Campestrini- que pudiera salvar a las Chivas y se trajeron un trío de Monterrey.<BR><BR>Pero no de esos que cantan boleros románticos, sino que cargaron con una tercia de goles en la portería de Rodolfo...