OPINIÓN

#TelevisaLeaks

Denise Dresser EN MURAL

4 MIN 00 SEG

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Qué fuerte se escucha el silencio sobre lo que Carmen Aristegui ha revelado en el llamado #TelevisaLeaks. Cuántos callan sobre el papel que Televisa ha jugado en la política del país, ayudando a unos, difamando a otros y orquestando campañas negras cuando el poder se lo pide. Cinco terabytes de chats, correos electrónicos, fotografías y videos evidencian una podredumbre que muchos han preferido ignorar. La comentocracia elude, los nuevos siervos evaden, y gran parte del periodismo rehúye tocar lo que debería ser un escándalo nacional. Y en Palacio Nacional, la estrategia -como siempre- ha sido crear otro distractor diario. La Presidenta se pelea con Ernesto Zedillo y el pasado, en vez de exigir cuentas sobre Arturo Zaldívar y el presente. Debería hacerlo, porque el personaje más enlodado por la cloaca destapada es el ex ministro de la Suprema Corte y actual operador de la elección judicial en puerta. #TelevisaLeaks exhibe la colusión entre una televisora inescrupulosa y un político podrido.