El Palacio de Gobierno fue vandalizado en la marcha convocada por la Generación Z por la violencia que azota el País.
La primera marcha se dio a las 11:00 horas en la Glorieta de las y los Desaparecidos, donde según Protección Civil, alrededor de 20 mil personas recorrieron las calles de la Ciudad para llegar a Casa Jalisco, donde pidieron justicia por el asesinato de Carlos Manzo, Alcalde de Uruapan, Michoacán.
Este primer grupo salió de Casa Jalisco alrededor de las 15:00 horas.
Después, cerca de las 16:00 horas otro contingente vandalizó el Palacio de Gobierno y el Congreso del Estado, donde rompieron las puertas de los recintos y lanzaron piedras a las ventanas.
En dicha marcha, el contingente gritaba consignas en contra del Gobierno Federal y del Gobierno Estatal, exigiendo soluciones por la violencia en la que está envuelta el país.
Al interior de Palacio de Gobierno, un grupo de policías estatales les impedía el paso a las y los manifestantes, por lo que no pudieron ingresar completamente al recinto.
Sin embargo, al arribar al Congreso del Estado, quienes protestaban derribaron las vallas de Plaza la Liberación -que se encuentra en remodelación- y utilizaron los picos y mazos de las obras para derribar las puertas del Congreso, donde únicamente se encontraba un policía.
Los elementos policiales trataron de salvaguardar las instalaciones con mangueras de agua y gases lacrimógenos, a pesar de eso, las personas que protestaban lograron derribar las puertas y prenderle fuego a una de ellas.
Cerca de las 18:00 horas un grupo de antimotines arribó al Congreso, donde repelió a algunos de los manifestantes.
Apesar de que a los alrededores del Palacio de Gobierno había familias con sus hijas e hijos, que no se encontraban manifestándose, los policías antimotines lanzaron granadas de gas lacrimógenos en las zonas donde estas personas se encontraban, además de usar un excesivo uso de la violencia para someter a las y los inconformes.
Entre los daños causados por las y los manifestantes están la destrucción de las puertas y ventanas de Palacio de Gobierno y el Congreso del Estado, así como el destrozo de mobiliario de la Plaza de Armas y la Plaza de la Liberación.