El discurso redentor se desmorona. El fervor morenista empieza a desdibujarse. Para colmo, "la purificación" de nuestra vida pública cayó en el olvido.<BR><BR>Tampoco ayuda que Pemex está en quiebra, que la economía está estancada y que la deuda pública ha crecido. Agreguemos el creciente...