OPINIÓN

MÉXICO MÁGICO / Catón EN MURAL

Icono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redes
Algo le faltaba al Nacimiento que cada año ponemos en nuestra casa en Navidad. Le faltaba algo, pero yo no sabía qué. Estaba, claro, el Misterio: la otra Santísima Trinidad que forman Jesús, María y José. Estaban el buey y la mulita, cuya humildad sirve para acentuar la grandeza del prodigio. Estaban el ángel y el gallo, mensajeros canoros del cielo y de la tierra, y bajo ellos los pastores con su redil de ovejas. Y estaban también el ermitaño y el diablo, muy cerca uno del otro como muy cerca están del hombre el bien y el mal. Pero algo le faltaba al Nacimiento, y yo no sabía qué.