He recogido trozos de la interesante autobiografía que escribió el general Crescenciano López Zuazua, descendiente de don Juan Zuazua, gran soldado de la República nacido en Lampazos, Nuevo León. Lampacense como su abuelo, don Crescenciano fue maderista primero y -cosa rara- carrancista después. Digo cosa rara porque maderistas y carrancistas no se podían ver, lo que fortalece la tesis de quienes afirman que tardo o temprano, quizá más temprano que tarde, el Varón de Cuatrociénegas se habría levantado contra el Apóstol de la Democracia. En los términos de esa arriesgada tesis la fatal intervención de Huerta salvó a don Venustiano de hacer sus veces. Sin embargo en cosas de Historia no tiene aplicación la palabra "hubiera", de modo que debemos hacer a un lado tan tremenda hipótesis.
Armando Fuentes Aguirre, "Catón". Nació y vive en Saltillo, Coahuila. Licenciado en Derecho; licenciado en Letras Españolas. Maestro universitario; humorista y humanista. Sus artículos periodísticos se leen en más de un centenar de publicaciones en el País y en el extranjero. Dicta conferencias sobre temas de política, historia y filosofía. Desde 1978 es cronista de la Ciudad de Saltillo. Su mayor orgullo es ser padre de cuatro hijos y abuelo de 13 nietos.