Aparte de todas las "virtudes" que adornan a la 4T, hoy debemos agregar una más: ¡Son muy obedientes! No porque le hagan caso a los ciudadanos o escuchen y atiendan sus deseos o peticiones, sino porque están al servicio solícito y total de una potencia extranjera. O por lo menos eso presumió ayer Donald J. Trump, Presidente Norteamericano, cuando declaró -oficial y públicamente- que "México hace lo que le decimos".