OPINIÓN
Carlos Bianchezi 'Careca' EN MURAL
MIN SEG
Apenas terminaron con éxito el Torneo Apertura 2011, y los directivos del actual campeón mexicano ya tienen sobre la mesa los desafíos para la temporada próxima.
Tomando en cuenta que jugarán cuatro torneos, dos en cada semestre, es lógico empezar a planear la llegada de algunos refuerzos y la salida de uno que otro "pachanguero", aprovechando el momento, ya que están bien valuados.
Y hablando de pachangueros, Danilinho les dejó un encargo extra. Al ser cuestionado sobre el caso de agresión del brasileño a una menor de edad, Alejandro Rodríguez no titubeó y dijo que lo defenderán, cuando lo más adecuado sería exigir que se esclarezca el caso y, de ser culpable, que pague las consecuencias de sus actos.
Probablemente al presidente del Club Tigres se le olvidó que esos felinos no sólo representan a una gran empresa cementera, sino también a una de las más importantes universidades de nuestro país, en donde los principios morales y la educación deben ser protegidos siempre. Y si bien es cierto que Danilinho dejó todo en la cancha, fuera de ella (de ser cierta la agresión) no sería digno de representar a la UANL y a Cemex.
Las grandes fiestas donde las desveladas están mezcladas con mujeres y alcohol son un secreto a voces. Son difíciles de erradicar, pero sí es posible controlarlas, y para eso existen los contratos, sanciones y despidos.
Este tema de la agresión fue el prietito en el arroz en la gran fiesta felina, pero queda la tranquilidad de saber que, por mejor que sea, no hay jugador insustituible.
Espero que las cosas se esclarezcan, que se tomen las medidas pertinentes y que este hecho no desvíe la atención y tampoco la intención de esta gran institución de mantenerse sobre esta línea ascendente, en busca del bicampeonato.
Disculpas
Hace pocos días critiqué a Aldo De Nigris por declarar que, de no ser campeones en el Mundial de Clubes, sería un fracaso para los Rayados, y el delantero tenía razón.
Monterrey no fue campeón y ligó su segundo fracaso en seis meses al no pasar de la primera fase, terminando así en un deshonroso penúltimo lugar.
Le ofrezco disculpas a Aldo por no haber leído entre líneas, cuando todos pensábamos que el Monterrey de perdido se enfrentaría a Santos en la Semifinal y, de no lograr el pase a la Final, estaría al nivel de los demás equipos mexicanos que nos representaron en esta justa internacional, y eso no debería ser considerado un fracaso, pero Aldo se nos adelantó y demostró que tenía la razón.
Monterrey no fue campeón y la forma en que nos representó debe ser considerada un megafracaso.
Definitivamente no fue el semestre de los Rayados.
careca@elnorte.com