La sesión de la Sala Superior del TEPJF del miércoles pasado, que trató sobre la validez de la elección judicial, mostró una buena fotografía del futuro de la justicia en México. El proyecto del magistrado Reyes Rodríguez, avalado por la magistrada Janine Otálora, quiso decirlo fuerte y claro: "las consecuencias institucionales de validar un proceso contaminado por la operación acordeón comprometen el objetivo mismo de la reforma y abren un riesgo efectivo para la autonomía judicial, ante la suplantación de la voluntad popular por mecanismos de coacción y propaganda prohibida".