En la aritmética legislativa el número clave no es 26, sino 20 curules. Aunque la mayoría calificada en el Congreso se consigue con 26 diputados (dos terceras partes), la mayoría absoluta se alcanza con solo 20 legisladores (la mitad más uno). Desde luego que en tiempos de sobrerrepresentación legislativa, los gobiernos buscan construir mayorías artificiales para controlar los Congresos y así reformar la Constitución (con el 66 por ciento), pues ya no se conforman con lograr la mayoría absoluta (51 por ciento), suficiente para aprobar presupuestos y leyes.