OPINIÓN

Mediocridad como anhelo

Eduardo Caccia EN MURAL

4 MIN 00 SEG

Icono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redes
En lo que llamó los albores de su ocaso, mi padre escribió un "Brevísimo tratado sobre la mediocridad", en el que hace referencia a su adolescencia, cuando leyó un cómic donde el protagonista resaltaba por ser un hombre mediocre. El adjetivo lo marcó: "no sé por qué, pero esa palabra me dio temor, casi miedo, y se me quedó grabada (...) He vivido con ella y creo que ha sido mi ángel de la guarda, mi acompañante inseparable". ¿Cómo pasa alguien de la turbación a convertir la mediocridad en estandarte? La respuesta está en la resignificación: ser mediocre es vivir en la medianía.