OPINIÓN

MÉXICO MÁGICO / Catón EN MURAL

Icono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redes
En la Ciudad de México había muchos salones para aprender a bailar. Se llamaban academias de danza. La más famosa era la Metropolitan, que tenía una pista donde cabían trescientas parejas. Otra de mucho prestigio era la Academia Simer. Su propietario, un señor apellidado Remis, simplemente escribió su apellido al revés para dar nombre al establecimiento.