OPINIÓN

Mucho de lo que más importa en Seinfeld está en aquello de lo que no se ocupa

Cuando nada es todo

LA MENOR IMPORTANCIA / José Israel Carranza EN MURAL

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Aun entre los mismos comediantes parece haber consenso en considerar a Jerry Seinfeld como uno de los más notables practicantes de lo que en Estados Unidos se conoce como observational comedy: un género de humor cuyo funcionamiento consiste en detectar y explotar aspectos inadvertidos de la realidad en la que estamos inmersos, a partir de un principio de perplejidad suscitada por lo que parece normal o familiar, y que, gracias a esa misma perplejidad, se revelará como absurdo. En documentales y entrevistas, así como en los pasajes de la serie que lleva su nombre donde se lo ve trabajando, es frecuente que Seinfeld aluda al «material» que alimenta sus creaciones: situaciones y conversaciones, sobre todo, de las que toma nota, conducido por un muy afinado sentido de la intuición. (Yo sostengo que ese ejercicio constante de observación y de interpretación destinado a la escritura de sus monólogos y sus guiones hace de Seinfeld uno de los ensayistas principales de nuestro tiempo, y seguramente uno de los más influyentes).