Cuando uno escribe sobre asuntos en los que tuvo una responsabilidad como funcionario, debe hacerlo con humildad y cuidado. Espero que las reflexiones que aquí aporto sobre esta coyuntura en la relación bilateral reflejen ambas.
1. En la relación México-EUA la realidad tiende a imponerse. Con algo de cuidado y buena diplomacia -de ambos lados- habrá una solución para el actual diferendo. No será perfecta ni dejará plenamente satisfecha a ninguna de las partes, pero será mejor que una confrontación abierta y prolongada. Nuestras economías son cada vez más interdependientes y esto lo saben los actores relevantes.
2. En efecto, imponer tarifas a México para solucionar una "crisis